En la capilla los chicos tomaron por primera vez la comunión. Hubo peticiones y rezos para ellos y sus familias y finalmente junto cura párroco recibieron una bendición especial.

Minutos después ya en las cómodas instalaciones del Club Confraternidad, se preparó un gran almuerzo a la canasta. Hubo música y alegría, parta testimoniar que en la comunidad tanto las familias como los niños de la primera comunión fueron el centro de los agasajos en una tradición que ya tiene varios años.
