Cuando la música es motivo de diversión y encuentros familiares

Carlos Hugo Jaques Uribe de Coronel Moldes es uno de los músicos más populares del sur de Córdoba.

A decir verdad, la continuidad de sus espectáculos musicales, lo han convertido en una figura más que conocida, por cuanto siempre tiene actividades en la amplificación, en la locución de espectáculos festivos y también cantando y haciendo divertir a la gente que es lo que más le gusta.
Carlos Hugo nació en Santiago (Chile) pero con apenas unos 8 a 9 años vino junto a su familia a la Argentina y allí se radicaron en Suco, en una vivienda contigua al Club San Lucas. En su relato recordó que el primer grupo musical que vio actuar fue los “Ticky Kon” de Coronel Moldes.

Después por esas cosas de la vida recaló en Coronel Moldes hasta la actualidad trabajando mucho y también comenzó a despegar su habilidad y atractivos por la música. También junto a su esposa Sonia formaron una hermosa familia.

Para este 21 de septiembre cumplirá nada menos que 35 años alegrando al público (ni la pandemia lo paró).

“Nosotros vamos mucho a los pueblos más chicos, como Bulnes, Malena, Tosquita, Washington, Villa Sarmiento donde aún se conserva el estilo de fiestas familiares, como antes», recuerda ante El Portal Regional..

Pero no todo es baile. La pandemia permitió “invenciones” que salieron muy bien y en un improvisado estudio de televisión en un garaje que después se mejoró, se inició la era de un programa musical en la que también se les da la oportunidad a otros artistas.

La tele en vivo es un desafío que se fue perfeccionando. Así surgió “Al mal tiempo, buena música” . Sale todos los jueves de 21 a 22,30 por el Facebook de Carlos Fernando Jaques Uribe, se ve en canal 2 de Coronel Moldes y también por Youtube.

El 21 de septiembre es la fecha en que Carlos Hugo cumple 35 años con la música. Y el 25 del mismo mes, serán 55 años de edad. Ya se viene preparando una fiesta en particular para conmemorar semejante acontecimiento.

“A nosotros lo que nos interesa es que la gente disfrute, que baile, que la pase bien. Con esa actividad, la función del músico ya está cumplida. Por supuesto que hay mucha gente a las que les debo agradecer, no solo de mi ciudad, sino de la región. A todos y en especial a mi familia que me banca y me acompaña. Así, los que hacemos y amamos la música estamos más que satisfechos y agradecidos».