La “Itala” fue una gran casa de Ramos Generales que adornó una de las principales esquinas del pueblo de Alejandro Roca. Se dice que sus orígenes datan de 1904 es decir un año antes de la fundación de Alejandro. Por este lugar desfilaron sulkys y carruajes, viejos Ford T guiados por valientes caballeros que se animaban a las nuevas técnicas. Después con el paso del tiempo cambiaron las modas, los personajes pero la esencia fue igual. Eran almacenes que en sus bodegas y sótanos guardaban de todo y que sus ventas se anotaban criteriosamente en los registros contables; esos libros gigantescos de los cuales algunos se han podido preservar. La reconocida firma Avetta & Cía por años instaló la importancia de un centro comercial completo hasta que el paso del tiempo hizo que ese gran negocio fuera quedando en el olvido.

La intendente Ariana Viola y sus funcionarios vieron que se podía recuperar y convertirlo en Centro Cultural. Y allí junto a Adriana Mistó a cargo del área de Cultura iniciaron el sueño de una restauración que por fin se pudo concretar este pasado viernes.

Acto de reinauguración

La ceremonia contó con la presencia del legislador Matías Viola, de autoridades policiales, municipales y vecinos en general.

Sus gruesas paredes que soportaron estoicas el paso inexorable del tiempo, un día vibraron como pocas veces, pero esta vez fue por la emoción de muchos alejandrinos.

En el acto inaugural usaron de la palabra la intendente Ariana Viola, la responsable de Cultura Adriana Mistó, no podía faltar el corte de cintas y cuando las luces se encendieron, los duendes de la historia comenzaron a saltar ebrios de alegría.

La “Itala” sigue presidiendo ese lugar, sólo que en vez de parroquianos y campesinos ávidos de llevar mercancías, ahora tendrán diversas expresiones artísticas rindiendo homenaje al arte, la historia, el pasado tan lejano pero que está al alcance de todos.

Un trabajo maravilloso de un ejército de personas comandados por el municipio y sus autoridades, se encargaron de restituir el brillo mágico de la “Itala” para que siga brillando tal como lo hizo en tantos años de vida comercial y que seguramente ahora lo seguirá haciendo en todo concepto cultural.