No hubo milagro para el oficialismo. Hubo una ola de votos para Javier Milei, que arrasó con la magia de Sergio Massa. No fue el enojo contra el miedo. Fue el enojo más el miedo.
Los más de 11 puntos porcentuales que separaron al candidato de La Libertad Avanza del oficialismo expresan el enojo de una mayoría social con la sucesión de fracasos de los últimos años y la desastrosa situación económica más el miedo a que se premiara o se perpetuara una forma de hacer política y de gobernar. Rechazo y temor a que todo siguiera igual o agravando las necesidades de la sociedad. Fin de ciclo. ¿Nueva era? Eso auguró el nuevo presidente electo.
El abrumador triunfo del candidato de la Libertad Avanza y la derrota del peronismo unido, que hizo la peor elección de su historia, son algunas de las grandes certezas dejadas por este balotaje. Un resultado que, al mismo tiempo, abre innumerables preguntas.
La elección de ayer es más la consecuencia de la crítica situación del presente y de los fracasos acumulados durante más de una década que una apuesta cierta y convencida hacia el futuro de la totalidad de sus votantes. El rechazo de lo conocido (y padecido) se impuso a la incógnita o el horror a lo desconocido. Un cambio absoluto, sin red, que Milei interpretó y encarnó mejor que ninguno de los rivales que tuvo en este larguísimo proceso electoral.
Se trata de un mundo por construir que el presidente electo, en su discurso triunfal, no reveló ni bocetó cómo será, en un escenario que ni siquiera compartió con el que podría ser su equipo de gobierno. Más incógnitas, a pesar de que no tiene mucho tempo para postergar esas definiciones. Aunque dijera, con cierta razón que hasta el 10 de diciembre todo es responsabilidad del actual gobierno que todavía preside el ausente Alberto Fernández y del que sigue siendo ministro Massa.
(La Nación)
En Córdoba
Milei ganó en 391 de los 426 pueblos y ciudades cordobesas
El candidato de la Libertad Avanza arrasó en la Provincia de Córdoba. En todo el territorio obtuvo el 74% de los votos lo que implicó ganar en 391 de las 426 poblaciones. Esto significa que venció en el 91% de los pueblos y ciudades cordobesas.
Como recordatorio puede señalarse que en los comicios del 22 de octubre Milei se había impuesto en 248 localidades y en las PASO de agosto en 251.
De estas cifras se deduce que gran parte de los votos obtenidos por Juan Schiaretti y Patricia Bulrich engrosaron los caudales del líder de la Libertad Avanza.
Sergio Massa se impuso en 35 localidades del interior. Retuvo la mayoría de los pueblos donde había ganado en octubre (fueron 23) y sumó 12 más donde se había impuesto Juan Schiaretti.