LA PEREGRINACIÓN A BULNES

Un día vino el padre Arias y nos dijo: ¿Que quieren que hagamos…un retiro espiritual o ir en peregrinación a pie hasta Bulnes? La respuesta fue unánime. Era el año 1977 y todos coincidimos en ir caminando a Bulnes.

Aquellos jóvenes eran Jorge Gregorio (Mateo) Paris, Walter Avanzini, Miguel Sosa, Víctor Poroto Miazzo, Héctor Mingo Amaya, Fernando Bustos y Fernando Llobell (+) quienes comenzaron trabajando para darle forma al proyecto.

Iban a participar los chicos de confirmación que eran como 300. Se sumaron a la propuesta Chichita Bogino , Adelina Angeletti y Sonia Castañeda tres chicas de Bulnes.

En un Renault Gordini uno de los organizadores de Sampacho y las chicas de Bulnes fueron a Coronel Moldes para tentar a los jóvenes de esa ciudad a que vengan a la primera peregrinación que iba a ser el 7 de agosto de 1977 justo la festividad de San Cayetano.

Un domingo y en pleno partido en la cancha de Everton nos recibió Cleto Medina, se puso en contacto con Héctor Omodei (ambos fallecidos pero vivos en el recuerdo) y luego Alicia Mores, Gerardo Brarda, Bibiana Moreira, Amanda Flores, Pollo Gagnolo, Mario Magallanes y Mario Martino fueron los que iniciaron la movida para venir a Bulnes.

Se agregaron decenas de chicos más para ese grupo maravilloso y esa peregrinación iba a tener dos extremos. Uno con partida desde Moldes y el otro de Sampacho.

Así se formó el Grupo Juvenil de Coronel Moldes que en octubre de ese año adquirió el nombre de «Fátima».

Se eligió un tema en la marcha que era «El sentido de la vida» y la canción identificatoria era «Adelante!!» (Notengamos miedo a nada adelante…!. La peregrinación estuvo muy organizada a tal punto que prometieron (y cumplieron) peregrinos de Adelia María, San Basilio y Achiras, Las Vertientes, Suco y Chaján. Seguramente que van a faltar nombres que se sumaron de inmediato por eso fue que el club Peñarol obsequió una cena para todos los equipos de trabajo con el padre Arias a la cabeza en la noche previa a la gran realización a pie.

Y así llegó el día. Todos los autos tenían una faja que identificaba a la peregrinación. Unos 650 jóvenes de ambos pueblos tomaron parte de la caminata. Hasta el mismo padre José Núñez Regüela ya anciano, se sumó caminando y después lo hizo el obispo Moisés Julio Blanchoud. En Bulnes los recibió el intendente César López con un solemne discurso y muy emocionado por cierto y fuimos al almuerzo en el salón chico de San Lorenzo colmado de jóvenes.

¡Que fiesta!. Hubo un plenario, canciones, sketchs y se terminó con la misa. Finalmente dos grandes caravanas de autos devolvieron caminantes a Moldes y Sampacho. Cansados pero felices dában cuenta de esa primera edición que en realidad no fue tal porque decía el padre Víctor Pugnatta que los seminaristas ya la hacían allá por los años 60.

En años posteriores se sumó el seminario diocesano, otros sacerdotes y peregrinos de diversas partes, pero el recuerdo de aquella edición de 1977 se hace imborrable.