Una larga cola de familias se observó en el apostadero naval de Puerto Belgrano donde se erigía la esbelta figura de los mástiles de la Fragata Libertad, nave insignia de la Armada Nacional y uno de los veleros más famosos del mundo.
«Venimos de Pedro Luro, queríamos verla porque estamos cerca», expresó un padre con dos niños que luego se calzaron una gorrita de cartón que asemejaba a las que usan los marinos. Hubo visitantes de Bahía Blanca, Torquinst, y la gran mayoría de Punta Alta.
Un equipo completo de protocolo y de la propia dotación del buque, tuvieron ardua tarea el pasado domingo 3 de abril para recibir los visitantes y a la vez responder a la infinidad de preguntas.
El comandante de la nave capitán de navío Carlos Schavinski dijo a El Portal Regional que el conducir la nave insignia de la Armada es «un orgullo y una gran responsabilidad con todo lo que significa la Fragata Libertad. Así qu el estar en este lugar y a la vez culminar la formación de los futuros oficiales de la Armada es más que un orgullo.
El capitán expresó que los cadetes realizan su último período a bordo de la Libertad para completar la práctica profesional aplicando todos los conocimientos que se receptaron en el período de formación.
El capitán manifestó que ahora en el apostadero naval de Buenos Aires, se ultimarán los preparativos para el próximo viaje de instrucción que el gallardo navío argentino iniciará desde el 30 de abril con 93 cadetes.
Los puertos que tocará la Libertad serán al norte de Brasil, Santo Domingo, Curazao, La Habana, Veracruz, Baltimore, Dublin, Saint Malo, (en Francia), Cádiz, Salvador Bahía y el 25 de septiembre se tiene previsto regresar a Buenos Aires.
Un riocuartense jefe de máquinas
El capitán de corbeta Pablo Toniato es el jefe de la sala de máquinas y responsable de todo lo que sea propulsión, la generación eléctrica y los sistemas auxiliares. Dijo que la fragata Libertad es un buque a vela y puede navegar por si sólo como se hacía antiguamente. No obstante cuenta con dos poderosos motores propulsores que funcionan en un promedio del 70 a 80 por ciento de la navegación. «Nosotros llamamos navegación mixta cuando avanzamos con motores y velas, si nó, también puede ser a vela pura».
Para este oficial desempeñarse como miembro de la tripulación del buque insignia argentino «es todo un orgullo. Creo que para cualquier oficial argentino navegar en esta Fragata es algo así como un premio. «Probablemente sea mi último viaje como jefe de máquinas», expresó.
Sobre el interés de los jóvenes por las cuestiones militares, el capitán Pablo Tonieto explicó que en efecto, viene mucha gente a visitar el barco y ahí se evidencia que hay interés por las consultas que se hacen, como es un día a día y pormenores de la vida militar. Al mismo tiempo expresó que hay profesionales interesados en ingresar a la fuerza por lo que la Armada brinda estas posibilidades de ser un futuro oficial ya profesional.
Todo está encaminado para que la Fragata Libertad inicie su 50º viaje de instrucción naval. Para este buque emblemático y su tripulación buenos vientos.