Como ocurre cada año, una multitud llegó a la «Tierra Santa» de Reducción a profesar su devoción al Señor de la Buena Muerte. El asunto es ir como se pueda, pero se trata de un ritual de muchos años el peregrinar hacia el histórico santuario para cumplir promesas y a la vez agradecer tantas gracias y bendiciones.
Este miércoles 3, miles de fieles viajaron en vehículos, bicicletas, motos y a pie tal como lo refleja la tradición. Hubo curiosidades tales como una columna de mujeres que caminó por caminos rurales desde Bengolea hasta los pies del Santo Cristo. Otros lo hicieron desde Río Cuarto y desde La Carlota, incluso hubo extensas cabalgatas como esos jinetes de Coronel Moldes que felices de cumplir con la promesa, recorrieron unos 130 kilómetros a caballo entre otros.
Acontecimientos
Ante la presencia del intendente Jorge Grazziano, del obispo diocesano Adolfo Uriona, la legisladora Graciela Bissotto, el comisario mayor Guillermo Tapia jefe de la Departamental de Policia, del intendente de Las Acequias Germán Martíni, se realizó una conferencia para hablar sobre temas centrales tales como se vino trabajando para intentar recuperar a los planos provinciales y nacionales a esta fiesta que, según las autoridades del municipio había quedado un tanto relegada.
La respuesta fue que entre 40 mil a 50 mil peregrinos viajaron a Reducción el pasado 1º de mayo.
Obsequios
Hubo entrega de obsequios a las autoridades. Entre ellos una plaqueta que recibió el obispo diocesano de manos de Jorge Grazziano. A su vez, en otro momento posterior, el obispo de Cruz del Eje Ricardo Araya trajo reliquias de San José Gabriel del Rosario Brochero para que queden definitivamente en la localidad.
Finalmente la procesión del Vía Crucics, permitió que una inmensa masa de fieles caminara estación por estación, hacia la cruz del ingreso donde fue impartida la bendición de lo que fue esta primera jornada.
Fotos: Bibiana Moreira